En Tucson, AZ, una escena desgarradora se desarrolló cuando Robert Moreno se rompió en llanto sobre el cuerpo de su hija Zahriya, de 22 años. Zahriya, quien fue desconectada de soporte vital tras una pelea fatal con su novio, fue llevada para donar sus órganos y así salvar a otros.
Esta historia es brutal. Zahriya era gemela. Y para empeorar las cosas, su hermano murió en un accidente de motocicleta hace solo tres años. Perder a un hijo es inimaginable; perder a ambos, eso ya es un dolor en otro nivel.
The family Zahriya Moreno, who was injured in a domestic violence incident on Monday, decided to donate her organs to save others. This is video from the emotional #HonorWalk held earlier today >> https://t.co/JGlad5iQLe pic.twitter.com/jLOOjbQdSA
— KOLDNews (@KOLDNews) August 14, 2024
Robert, luchando contra las lágrimas, dijo a KOLD: “Perdimos a nuestros gemelos. Va a haber mucha oscuridad en el futuro, pero vamos a superarlo”. La fuerza de este hombre, incluso frente a semejante tragedia, es impresionante.
Pero en medio de esta oscuridad, hay un rayo de esperanza. Los órganos de Zahriya darán a otros una oportunidad de vida. “Es maravilloso saber que partes de mi bebé seguirán viviendo”, dijo Robert. Es un consuelo agridulce, pero un consuelo al fin.
El incidente que llevó a esta tragedia ocurrió cuando Zahriya cayó del auto de su novio mientras él intentaba escapar durante una pelea. Una vida joven, llena de potencial, apagada en un instante.
La vida lanza algunas bolas curvas muy duras, y esta es un verdadero golpe bajo. La historia de Zahriya es un recordatorio de lo frágil que es la vida y de la inimaginable fortaleza que se necesita para seguir adelante después de perder tanto.